sábado, 14 de diciembre de 2013

"Quien viaja demasiado aprisa se pierde la esencia del viaje" Louis L'Amour

Me considero una persona organizada y previsora por lo que soy de las que intenta organizar al máximo su viaje, pero si hay algo que he ido aprendiendo, es que a veces, surgen imprevistos y no se puede hacer todo lo planificado o por querer hacer aquello que hay que hacer nos perdemos muchas otras cosas de nuestro alrededor. 
Es posible que a la vuelta de nuestro viaje personas que ya han estado allí nos expliquen otras vivencias y a veces da la sensación que no has estado en el mismo lugar o que te has dejado un montón de cosas que hacer y visitar, pero en realidad, cada uno hace su viaje de una manera distinta, muy personal, dependerá de la época del año en que se hace, de tus intereses en ese momento, del tiempo de estancia, de la compañía...Viajar a un mismo destino no implica ver las mismas cosas que otros pero nos estresamos con la idea de que hay que verlo todo. Sí es cierto que en cada destino hay que visitar los lugares míticos, el Coliseo en Roma, el Empire en NuevaYork, la Sagrada Familia en BCN... pero aun así, tenemos que hacer el viaje nuestro. 
No es que esté en contra de los viajes organizados por agencias, pero creo que a viajar también se aprende y una de las cosas que hay que aprender es a disfrutar de cada momento.
Lo primero que aconsejo hacer es ir sin reloj, intentar no tener horarios y hacer un stop en el camino para disfrutar de una terracita frente al mar o estar sentados en un banco de la plaza principal observando la vida del lugar o subir a un mirador y disfrutar de las vistas sin prisas y sobretodo dedicarle tiempo al momento foto.

En definitiva, no pasa nada por no cumplir con lo previsto, si estás a gusto aquí y ahora prolonguemos ese momento el tiempo que queramos y disfrutemos él.



6 comentarios :

  1. ¡Que razón Verónica! A mi me pasaba lo mismo. Ahora ya no los planifico. Me informo, recopilo datos, visitas, me hago una idea de lo que quiero ver y dónde está... vamos me hago una composición de lugar, pero no llevo nada cerrado a no ser que requiera una reserva previa o algo así, y luego dejo que el propio viaje me vaya indicando qué hacer, porque allí descubres cosas nuevas, porque de repente llueve y no puedes hacer lo que querías, porque como dices surgen mil y un porques... creo que ahora aprovecho mucho más la experiencia de ir a cualquier sito... pero ya sabes, creciendo y aprendiendo.

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  2. Me ha encantado tu post!!! y por supuesto no podría esta más de acuerdo contigo! Yo hace unos años cuando viajaba me gustaba llevar todo muy planificado, me hacía una ruta de todos los sitios que quería ver con toda la información posible. Sin embargo, ahora es todo lo contrario! leo y me documento sobre el lugar el cuestión, pero me he dado cuenta que todas esa planificaciones que antes hacía nunca se cumplían, pues en el viaje conoces gente o lugares que hacen que tu ruta se desvíe un poco de lo planificado y como tú bien dices, si estás a gusto ahí y ahora porque vas a hacer otra cosa simplemente porque lo ponga en un papel, es mejor dejarse llevar, al final de eso se trata un viaje de disfrutarlo!!
    Un saludo!

    Patri

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    1. Y además si no te salí bien el plan hasta me enfadaba.
      Muchas gracias por tu comentario

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  3. Que razón tienes, yo tengo alergia a los viajes organizados y más a los de grupos numerosos en los que te llevan como ovejas a ver cuantas más cosas mejor.
    No puedes disfrutar del momento, si te apetece pararte más en un sitio no puedes porque te dejan tirado. Parece una competición, que estrés.
    Yo no concibo los viajes así, me gusta disfrutar de todos los aspectos del viaje, del antes, durante y después.
    Un saludo!

    Mar Vara
    aunclicdelaaventura.com

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    1. Pues sí Mar, ni a comprar un "souvenir" te dejan, bueno sí, donde el guía de turno quiere

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