sábado, 30 de mayo de 2015

Bahía de Halong II

"Suelta las cuerdas de tus velas. Navega lejos del puerto seguro. Atrapa vientos favorables. Explora, sueña, descubre" Marc Twain


Como decía en el post anterior (que si aún no has leído ya puedes hacerlo aquí) aún quedaban cosas por hacer. Llegó el momento cayak.


Los que me habéis leído alguna vez ya sabéis que no soy muy de ejercicio físico, pero ahí estaba yo, en el cayak con Cristina y un remo en la mano, como esperáis, sí, iba detrás del grupo todo el rato, por más que remaba no había manera de seguir el ritmo ¡pobre Cristina! Las imágenes de la Bahía desde el cayak son espectaculares y se puede acceder a cuevas y zonas rocosas que desde el barco no se pueden apreciar. Al no tener funda para la cámara no me la llevé al Cayak, no me imagino con mi torpeza habitual, remando y encima haciendo fotos sin funda impermeable, por evitar disgustos preferí no tener fotos.

La hora de subir al barco no fue mucho mejor, fue un show la bajada del kayak y la subida al barco, nos golpeamos entre nosotros, nos girábamos sobre nosotros mismos poniéndonos de espaldas al barco, aquella situación me provocaba tanta risa que aún me hacía estar más torpe (sí, aún se puede serlo más) y dejar de remar con la consecuencia de estar más lejos del barco cada vez.
Una vez ya arriba, media hora para la ducha y volver a cubierta para el taller de cocina y cenar.
La imagen del atardecer ya nos hace sospechar que entre alguna nube, barcos y rocas poco amanecer íbamos a ver.


El taller de cocina no era más que una mesa todos alrededor unos cuantos ingredientes y a enseñarte hacer un rollito ¡Ojo! que no es fácil, tampoco tengo foto ya que entre los guantes para coger la comida, el trabajo manual que requiere fabricar el rollito y la pringue de la salsa con la que se come, no pude ¿os he comentado mi nivel de torpeza habitual? pues eso.
No, esta cena no la preparamos nosotros.

A las 7h del día 31 el desayuno.

Si, si, a las 7h, pero ya estábamos despiertos la mayoría por que queríamos ver el amanecer. No hay foto porque no conseguimos verlo

La actividad siguiente era la subida de millones escaleras que te llevan a un mirador...

 ... con estas vistas de las que disfrutamos después de recuperar el aliento.

Aquí estoy yo, cansada de subir mil escaleras y no era ni las 10h de la mañana

Abajo nos espera una mini playa algo artificial, chapuzón para combatir el calor y vuelta al barco.

Brunch sobre las 11h, más digno de llamarse banquete, mientras llegamos al puerto de Halong, de nuevo al ferry con los chalecos llenos de mierda y de ahí al autobús.

Esta vez dado que ya estábamos acostumbrados a invadir el carril contrario no sentí tanto miedo, eso sí, parecía que había prisa y en lugar de autobús parecía que íbamos a caballo de los botes que daba aquello.
Casi se me olvida, la parada de rigor y por fin compra de chocolate.
Algo es algo
4 horas después llegamos al mismo hotel en Hanoi. Lo que hicimos fue el día de marchar al circuito (el 30) pagar las dos noches que estuvimos y reservar la noche que volvíamos, la del 31, por lo que ahorramos una noche de hotel (la que pasamos en el barco, es decir la del 30 que ya pagamos en el circuito contratado con Vega Travel )

A diferencia de lo que había leído en otros blogs no encontré la zona sucia a pesar de la cantidad de barcos como el nuestro lleno de turistas.

Un par de CONSEJOS:
1. Si no se dispone de mucho tiempo no contrataría la noche del barco en la Bahía, lo único que merece la pena, quizás, sería el paseo en cayak, pero ni amanecer ni nada especial que en un día no pueda verse. Si se tiene algo de tiempo quizás sería ideal hacerlo al final de viaje ya que hay muchos momentos de relax y desconexión.
2. Llevar cangrejeras, chanclas de goma o similar ya que te hacen subir al kayak descalza y muy higiénico no lo vi.


Si te apetece comentar el post, ADELANTE, es gratis.



6 comentarios :

  1. Ya me encantó el primer artículo, pero aquí las fotos del paisaje de la bahía me han quitado el habla, sobre todo el de la foto número 13.... y todas las demás también.

    Saludos,
    GranPumuki

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y aún hay más fotos, no daba a basto, un paisaje espectacular sin duda. Esa foto creo que habla por si sola de la tranquilidad del momento, de los mejores instantes del viaje.

      Eliminar
  2. Hola! Hasta la fotografía entraña cierto riesgo jaja. Habíamos escuchado opiniones diversas de la Bahía de Halong. Personalmente, nos gustaría conocerla algún día el paisaje debe ser espectacular aunque siempre habrá ciertos inconvenientes con los típicos tours contratados. Al menos aprendiste a hacer un rollito jeje.
    Saludos!
    Robert y Ely

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad que yo también iba con muchas dudas, pero es de los sitios que hay que visitar una vez en la vida y me sorprendió para bien, a pesar de los tours, los barcos estaban bastante distanciados unos de los otros y al menos el nuestro era pequeño por lo que eramos 12 personas y congeniamos muy bien desde el principio. Una experiencia positiva

      Eliminar
  3. Muy bueno este post, no se si me ha cansado más subir las escaleras o imaginarme en el kayak.... Desde luego, fue un día de no parar!!! Entre cocina y actividades.... Divinas las fotos de la bahía.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja. Quizás las escaleras es lo peor, pero las vistas bien lo merecen.

      Eliminar